Chacarita es un divertido barrio de Buenos Aires que combina escenas típicas de la realidad porteña con la oferta de zonas más turísticas.
Ligeramente fuera, pero no demasiado, de los circuitos habituales de la capital, el barrio de la Chacarita se organiza en torno al cementerio más grande de la ciudad, con una energía barrial pero al mismo tiempo actual y divertida.
Hace tiempo que Chacarita empezó a vivir una transformación, un renacimiento si se quiere, que ha puesto el barrio en el podio de las mejores zonas para vivir, especialmente para los jovenes (de edad o de espíritu) que no quieren perderse de nada.
¿Cómo es Chacarita?
Chacarita tiene una combinación rara entre ser un barrio hipster y ser un barrio muy crudo, es decir, que puede mostrar la cara menos turística de la ciudad. Uno puede estar caminando por una calle llena de bares y restaurantes de moda y al doblar la esquina, sentirse como en una villa.
Chacarita es un barrio de casas bajas, en apariencia tranquilo, pero lleno de sorpresas. Alrededor del cementerio hay un movimiento agitado de vida comercial, vida social y transporte; gracias a la estación de tren y al parque. En los últimos años no se puede negar que el barrio se ha «palermizado» un poco, albergando algunos de los cafés, bares y restaurantes con más onda de la ciudad.
Sin ánimos de alarmar, y aclarando que a mí nunca me pasó nada en Chacarita (vivo acá hace varios años), no es un barrio para estar completamente relajados y desafiantes. Mejor cuidar las pertenencias y andar con cierta vigilancia, sobre todo alrededor de la estación.
Chacarita limita con Palermo y Colegiales por un lado (adoptando así esa sensación de estar siempre de moda, de estar siempre “posando”) y con Villa Ortúzar, Paternal y Villa Crespo por otro lado, barrios con los que comparte cierta personalidad anti-palermitana. Una ironía que le queda muy bien.
Es un barrio ideal para los que buscan cierta tranquilidad pero también cierta acción, como vivir en Palermo sin tener que vivir en Palermo – y con la tolerancia de ver algunas escenas de la realidad local que pueden ser menos lindas.
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¿Qué hacer en Chacarita?
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- Visitar el Cementerio de Chacarita. El más grande de Argentina y uno de los más grandes del mundo, el cementerio de Chacarita es un universo que merece un recorrido atento entre bóvedas y estatuas, o entre sus pasillos subterráneos. Se encuentran allí la tumba de Perón (vacía), la de Gustavo Cerati, Carlos Gardel, Anibal Troilo, y más. Más info acá.
- Pasar una tarde en Parque Los Andes. Junto al cementerio, el parque Los Andes se llena de vida los sábados y domingos con un mercado de pulgas, mucho menos turístico que la feria de San Telmo, donde se pueden encontrar algunas gangas o simplemente chusmear. También se puede hacer un picnic entre grupos de músicos que ensayan allí.
- El Imperio de la Pizza. Una de las pizzerías más emblemáticas de Buenos Aires para comer una clásica pizza porteña, ni más ni menos, después de caminar por el parque y el cementerio.
- Comer y tomar. Después de tachar El Imperio de la lista (una visita más cultural que otra cosa) es necesario recorrer el circuito gastronómico de Chacarita que es uno de los más sólidos de Buenos Aires. Encontrarán una lista detallada al final de esta misma esta nota.
- Museo Simik. Más un café que un museo, puede ser una linda merienda entre cámaras antiguas y con sus ocasionales conciertos de jazz. Leer más del Museo Simik.
- Cementerio británico y cementerio alemán. Si se quedaron cortos de cementerios, y de forma totalmente opcional, pueden visitar el cementerio británico y el alemán, uno al lado del otro.
- Falena. Una de las librerías más lindas de Buenos Aires, misteriosa y casi oculta (era secreta hasta que llegaron los influencers). Leer más de Falena
- Artlab. Un lugar que es único en su estilo en la ciudad: una sala de conciertos, salón de eventos, centro cultural y galería de artes interactivas y audiovisuales, todo en uno. Leer más de Artlab
- La Grande. Una de nuestras fiestas favoritas se hace todos los martes en Santos Dumont 4040. Leer más de La Grande
- Centro Cultural Carlos Gardel. Uno de los más conocidos y consolidados del barrio, con talleres, shows y milongas, y muchas actividades gratuitas.
- Movida under. En realidad, Chacarita tiene varios puntos culturales de corte más alternativo, que les recomendamos descubrir directamente en la calle y adueñarse por cuenta propia.
Historia y Curiosidades
- El nombre del barrio viene de «chácara» o «chacra», voz quechua que significa «granja» o «quinta». El barrio era conocido como “la Chacarita de los Colegiales”, porque era la chacra de un colegio.
- El cementerio de la Chacarita nació como respuesta a la epidemia de fiebre amarilla que azotó la ciudad. En 1896, comenzó a llamarse Cementerio del Oeste, pero al ser popularmente conocido como Cementerio de la Chacarita, en 1949, volvió a este nombre a través de una ordenanza.
- La entrada principal del cementerio es una imponente estructura neoclásica de 24 columnas. El pórtico principal tiene una alegoría del Juicio Final, y adentro hay una réplica de «La Piedad» de Miguel Ángel.
Cafés, Bares y Restaurantes de Chacarita
Una lista no exhaustiva de los favoritos BAC en Chacarita.
> Restaurantes
- Georgie’s (tacos / fusión)
- Picarón (de autor)
- Anchoita y Anchoita Cava (de autor / vino)
- El Imperio de la Pizza (pizzería emblemática)
- Albamonte (bodegón)
- Gambrinus (bodegón)
- Lardito (platitos)
- Allegra (variado)
- Feel in Pita (de los mejores falafel)
- Condarco (platitos)
- Obrador (de autor)
- Donnet (hongos)
- Ajo Negro (tapas)
- Ácido (platitos)
- Nanum (coreano)
> Cafés
> Bares
- Naranjo (especialidad vinos)
- Casa Seis (especialidad vinos)
- CANTI (especialidad vinos)
- La Fuerza (especialidad vermut)
- Vecindá (el living del barrio)
- SEDE (especialidad whisky)
- Nempla (música en vivo!)
- Sifón (tragos con soda)
- Rodney (legendario bar de rock)
- Imprenta (vino y platitos)
- Dimi
- Lutero
- Sofá
