La salida al principal hipódromo de Buenos Aires es un clásico. Pero pueden también aventurarse en los dos hipódromos más famosos de Provincia. Déjense contagiar por la adrenalina de los «habitués» para palpar la cultura hípica argentina
Argentina tiene una profunda tradición ecuestre. Acá el caballo es más que un símbolo: es parte de la identidad nacional. Desde el gaucho hasta el polo y las carreras, los hipódromos de Buenos Aires son testigos de cómo el país respira pasión por la hípica.
Cada noviembre, el Gran Premio Nacional convierte al Hipódromo de Palermo en el epicentro del turf. Con más de un siglo de historia, este Derby argentino es el evento más esperado del calendario, donde deporte, moda y sociedad se fusionan. Las damas de la alta clase deslumbran con sus sombreros y fascinators, mientras en las tribunas conviven todas las clases sociales, reflejando la esencia popular de la hípica.
Más que una carrera, es un espectáculo donde tradición y modernidad se encuentran, reafirmando la eterna conexión de Argentina con el mundo ecuestre.
La Experiencia del Turf en los hipódromos en Buenos Aires
El espectáculo comienza al observar la intensidad con que se viven las carreras en la tribuna popular. Luego, pasando por la ronda de exhibición, lugar en donde los jinetes presentan a sus caballos dando justamente vueltas en ronda para que el público pueda analizarlos antes de apostar. Algunos apostadores eligen por instinto, otros basan su decisión en un minucioso análisis de estadísticas, y hay quienes se dejan llevar simplemente por nombres llamativos, como el de la legendaria yegua Napa Valley.
Las apuestas comienzan con montos asequibles y se realizan mediante un número asignado a cada caballo en garitas habilitadas. Entre tradición y adrenalina, los Hipódromos de Buenos Aires ofrecen una experiencia única donde el turf se vive en su máxima expresión.
Hipódromo Argentino de Palermo
El Hipódromo Argentino de Palermo es una joya arquitectónica que evoca el estilo clásico francés del siglo XVII. Recorrer sus instalaciones es en sí mismo un paseo cultural.
Su Tribuna Oficial y el restaurant La Paris han sido declarados Patrimonio Arquitectónico de la Ciudad y conservan la fachada original diseñada por el prestigioso arquitecto francés Louis Faure Dujarric. Esta combinación de historia y elegancia lo convierte en un emblema de la tradición hípica argentina.
Con entrada libre y gratuita, su gran atractivo, como en todos los hipódromos, son las carreras de caballos. Al ingresar, podemos adquirir La Rosa, la histórica publicación del turf argentino, vigente desde hace más de 90 años, donde se pueden encontrar estadísticas, nombres de los caballos competidores, sus jockeys y otros datos claves a la hora de apostar.
Otras Actividades en el Hipódromo de Palermo
El Hipódromo de Palermo ofrece mucho más que carreras. Cada mes, se realiza una feria gastronómica con propuestas temáticas, actividades y DJ en vivo. Ideal para disfrutar solo, en pareja, con amigos o en familia, con buena comida, entretenimiento y un entorno único.
También funciona el bar Rabieta en La París que ofrece una gran variedad de cervezas artesanales.
Otra opción es La terraza de Tucson en donde se puede probar comida estilo americana con vistas a las pistas.
Otros Hipódromos
Además del Hipódromo de Palermo, Argentina cuenta con otros circuitos hípicos de gran tradición, como el Hipódromo de San Isidro, el Hipódromo de La Plata y el Hipódromo de Rosario.
Sepan que el mundo hípico está muy bien reflejado en la maravillosa película de Luis Ortega, El Jockey, anímense a descubrir esta increíble experiencia que mezcla estilo, adrenalina y tradición. Los hipódromos de Buenos Aires los esperan para sorprenderlos con lo mejor de la cultura hípica argentina.
